.

febrero de 2008  


 ¡Por una huelga nacional contra los planes hambreadores de Calderón!
¡Abajo con el PRI, PAN y PRD – partidos de la burguesía!
¡Forjemos un partido obrero revolucionario!

1° de FEBRERO – Una vez más, el gobierno de Felipe Calderón Hinojosa tropezó con la firme y resuelta resistencia de los aguerridos mineros de Cananea. Mil policías federales y estatales, estos últimos enviados por el gobernador Eduardo Bours Castelo, no pudieron con los mil 300 trabajadores que desde el 30 de julio pasado han paralizado la mina cuprífera más grande de América Latina. Los anunciados cientos de esquiroles se desvanecieron, y los pocos que se ofrecieron para romper la huelga pronto abandonaron la mina vacía. ¡Que Felipillo se cuide o podría naufragar en el alto desierto sonorense!

Poco antes del mediodía del 11 de enero, la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje (JFCyA) declaró “inexistente” la huelga de seis meses de los mineros del cobre en Cananea, Sonora. Horas antes, una tropa de ocupación policíaca arribó a la localidad minera a bordo de una flota de unos 80 vehículos. Minutos después de que la junta anunciara su fallo, las fuerzas represivas inundaron las calles de Cananea y se dirigieron a la mina, bajo ocupación de los huelguistas desde hacía 165 días. Entre los trabajadores hubo al menos 50 personas lesionadas, entre ellas esposas e hijos de los huelguistas.

Combativa asamblea minera en Cananea el 12 de enero.
(Foto: Guillermo Arias/AP)

Aún frente a esta tropa de asalto, los mineros no se rindieron y en lugar de darse por vencidos libraron una resistencia obstinada. En un reportaje desde Cananea, los periodistas Felipe Larios y Fernando Gutiérrez informaron en Dossier Político (14 de enero) de Hermosillo que “Cerca de 600 de los mil 287 huelguistas desalojados lograron reagruparse y atacaron a los agentes que resguardaban la mina lanzándoles perdigones de metal y bombas molotov, además de incendiar varios vehículos y dañar las instalaciones de la empresa, para luego concentrarse frente a la presidencia municipal y exigir que la policía se retire de la mina”.

Al otro día, el sábado 12 de enero, cientos de mineros celebraron una asamblea extraordinaria en el mineral donde gritaron que mantienen su determinación de seguir luchando. Ahí vieron a Napoleón Gómez Urrutia, el dirigente en exilio del gremio minero, hablando mediante video conferencia desde Cana­dá, en la que exigió el cese de la represión y “urgió a las bases trabajadoras a retomar las instalaciones y colocar de nuevo la bandera rojo y negra” de la huelga.

También hubo comunicación con la asamblea desde un piquete de emergencia frente al consulado mexicano en Nueva York, convocado por el Grupo Internacionalista, sección estadounidense de la Liga por la IV Internacional. Una veintena de manifestantes gritaron, “Ejército fuera, policía fuera, viva, viva la huelga minera” y “La lucha obrera no tiene frontera”. El piquete contó con la participación de sindicalistas de la UFT (maestros de escuelas secundarias), del PSC (profesores universitarios) y de los Teamsters.

Hablando con Sergio Tolano, dirigente de la Sección 65, uno de los manifestantes comentó, “Después del brutal ataque policíaca en Oaxaca en 2006, en Nueva York estamos muy atentos a los actos represivos del gobierno mexicano”. “La huelga de 1906 en Cananea fue una acción conjunta de trabajadores mexicanos y estadounidenses”, agregó uno de los organizadores de la protesta. “Hoy nuevamente estamos instando al movimiento sindical norteamericano a mostrar su solidaridad obrera activa en apoyo a los mineros de Cananea.”

Los manifestantes también defendieron el derecho a la ciudadanía para los trabajadores migrantes frente al acoso de la policía migratoria. Al mismo tiempo que los mineros de Cananea se enfrentaron con policías pertrechados para la guerra, al otro lado de la línea, migrantes latinos en Arizona están siendo acosados por una nueva ley estatal contra los trabajadores indocumentados mientras los fascistas encapuchados del Ku Klux Klan se manifiestan abiertamente en las calles.

Se informó del piquete en un artículo con foto del periódico neoyorquino El Diario-La Prensa, que luego fue reproducido en El Imparcial de Hermosillo. Asimismo hubo un reporte en Dossier Político, y una foto del piquete neoyorquino fue publicado en La Jornada en México, D.F.

Lucha contra los ataques de la patronal y del gobierno empresarial


Policías de Sonora al desalojar los de Cananea en enero.

(Foto: Dossier Político [Hermosillo])

Los mineros están luchando en contra de las infames condiciones de seguridad en la mina y en la pulverizadora. Las instalaciones se encuentran gravemente deterioradas desde que la mina fue privatizada en 1990. Delegaciones de sindicalistas norteamericanos, particularmente de los Steel Workers (acereros) de Arizona, han visitado la mina, lo que hicieron también durante las huelgas anteriores.

El gobierno federal ha usado reiteradamente la corporati­vista legislación laboral mexicana, modelada sobre la base del código laboral de la Italia fascista de Mussolini, para ilegalizar la huelga minera. Aunque los tribunales han otorgado amparos en contra de los dictados de la JFCyA, los gobiernos estatal y federal han optado por hacer sentir el puño de la represión.

Las condiciones de seguridad en la planta de Cananea son tan tristemente célebres, que un equipo internacional de médicos y de profesionales de la salud industrial que visitó la planta en huelga en octubre, afirmó haber encontrado una “clara situación en la que el lugar de trabajo está ‘llevándose deliberadamente hacia el colapso’.” La mina forma parte del Grupo México, propiedad del multimillonario Germán Larrea, el también dueño de la mina de carbón en Pasta de Conchos, donde 65 mineros fueron sepultados vivos en febrero de 2006.

Otro motivo de la huelga es resistir el intento del gobierno calderonista de imponer un sindicato blanco en la empresa, tanto al nivel local como nacional. Sin embargo, este intento ha encallado en el escollo de la combatividad de los mineros cananenses, quienes han ido a huelga casi anualmente desde 1999, incluso cuando han sido apuñalados por la espaldo por el propio gremio minero nacional.

Policías federales y estatales se aprestan para atacar a los resistentes mineros. (Foto: El Imparcial)

En diciembre, una delegación del Sindicato de Trabajadores de la Universidad Autónoma Metropolitana (SITUAM) viajó desde la Ciudad de México para brindar su solidaridad con los mineros de Cananea. Llevaron un aporte simbólico de 5 mil pesos de comestibles y una enorme manta dando sus “saludos fraternos” a la “digna huelga de los mineros de Cananea”.

En una declaración cumpliendo un resolutivo del XXXIX Congreso General Extraordinario del SITUAM declararon: “Reconocemos que la huelga de Cananea necesita apoyo inmediato e incondicional para resistir las arremetidas de los jefes asesinos de Minera México”. Se convocó al movimiento obrero organizado “a que se sumen a mostrar su solidaridad con esta importante huelga minera, así como a la sentida exigencia del rescate de los cuerpos de los mineros asesinados en Pasta de Conchos, el año pasado” (Dossier Político, 19 de diciembre de 2007).

En el SITUAM, militantes del Comité de Lucha Proletaria, ligado al Grupo Internacionalista/México, han luchado desde el mes de agosto por movilizar el sindicato en apoyo de la huelga minera. En estos momentos el sindicato de la UAM está decidiéndose sobre irse a huelga en torno a su propio contrato, mientras los contratos de varios gremios universitarios en el Valle de México vencen en este mes. El CLP está llamando por ampliar la lucha del SITUAM a una huelga conjunta de todos los sindicatos del sector en la región, y también por la movilización huelguística nacional contra el gobierno calderonista.

¡Forjar una dirección clasista y revolucionaria!

Por el momento, el amparo concedido por un tribunal federal anuló la segunda declaración de “inexistencia” de la huelga de Cananea por parte de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social. Pero detrás de ese laudo está la voluntad de lucha de los mineros, que no se dejaron amedrentar durante cinco meses de supuesta inexistencia legal de su huelga. Es tan fulminante su existencia real que el dueño, el Grupo México, se queja de perder 3 millones 500 mil dólares al día por la producción paralizada.

Sin embargo, hay un hecho innegable: los mineros cananenses están luchando prácticamente a solas. Junto con la Sección 65 del Sindicato de Trabajadores Mineros, Metalúrgicos y Similares de la República Mexicana (STMMSRM) de Cananea, sólo están en huelga la Sección 201 de Sombrerete, Zacatecas, y la 17 de los mineros de plata de Taxco, Guerrero (donde la patronal recién amenazó con cerrar la mina). El día 15 de enero hubo un paro de ocho horas de algo más de 20 mil mineros en repudio a la andanada policíaca en Cananea. Pero se necesita mucho más para asestar un golpe contundente al gobierno empresarial y la patronal, confabulados contra los mineros.


Donde pararon el 15 de enero. Se necesita mucho más: una huelga minera nacional


Ilustración: El Universal

Urge una gran huelga nacional de toda la minería del país, abarcando también la rama siderúrgica, y de todos los sectores del Grupo México, incluyendo los ferrocarriles. Al mismo tiempo, siendo que el ataque gubernamental y patronal contra los mineros es la avanzada de una arremetida general contra la clase obrera mexicana, tanto al nivel legal (la anunciada “reforma” de la Ley Federal del Trabajo) como económico (los brutales alzas de precios de los productos de primera necesidad debido al gasolinazo y otras medidas antiobreras), se necesita una huelga nacional contra la política represiva y hambreadora del gobierno.

Sin embargo, y no obstante los ataques de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social en contra de Gómez Urrutia, el jefe del STMMSRM, la dirección del gremio corporativista ha acatado escrupulosamente la corporativista legalidad laboral mexicana. Por su parte, los sindicatos reputados como “independientes” de la Unión Nacional de Trabajadores y del Frente Sindical Mexicano no han levantado un dedo para solidarizarse activamente con los huelguistas de Cananea. También en 2006, la UNT y el FSM dejaron a los maestros, trabajadores e indígenas oaxaqueños enfrentarse solos durante más de seis meses con el gobierno asesino de Ulises Ruiz Ortiz. 

Los “sindicatos” del CT, la CTM, la CROC, la CROM y demás centrales corporativistas incrustadas en el aparato estatal funcionaron durante largas décadas como policías laborales para el PRI-gobierno, con el fin de evitar el surgimiento de verdaderos sindicatos obreros. Ahora siguen siendo “institucionales” con el PAN. Los “independientes”, en cambio, están políticamente atados al PRD, partido nacionalista-populista burgués. Mientras estos últimos fulminan contra el “neoliberalismo”, acatan las reglas del capitalismo. Y todos estos partidos capitalistas (y sus satélites) han sido corresponsables de las matanzas contra obreros, maestros, campesinos y estudiantes de los últimos años.

En Oaxaca, Atenco, Lázaro Cárdenas y ahora, de nuevo, en Cananea, los trabajadores han ofrecido una resistencia tenaz ante la arremetida mortífera de la clase dominante. Sin embargo, no ha llegado a más. Se queda al nivel de una resistencia eterna, siendo que debería darse una lucha por el poder. Para eso, se necesita una dirección clasista en los sindicatos que han roto todos los lazos con el estado y los partidos burgueses, y la construcción de un partido obrero revolucionario dotado de un programa internacionalista.


Ver también: Piquete en Nueva York repudia represión contra mineros mexicanos  (12 de enero de 2008)
                    
¡Poner a Grupo México de rodillas con una huelga nacional! (15 de diciembre 2007)
                     Cananea: un siglo de lucha de clases internacionalista (diciembre de 2007)
                    
Cananea, el PLM y el racismo antichino (febrero de 2008)


Para contactar el Grupo Internacionalista y la Liga por la IV Internacional, escribe a: internationalistgroup@msn.com

Regresar a la página del GRUPO INTERNACIONALISTA